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La iniciativa es del diputado nacional Eduardo Toniolli, quien en conjunto con Oscar Castelucci, padre de Martín -asesinado por un patovica en 2006-, y otros familiares de víctimas de violencia, busca «promover políticas públicas para que la noche sea un espacio de convivencia segura y libre de violencia».

“La noche siempre ha sido un ámbito reservado para la diversión, el disfrute, el espectáculo (en el que suelen transitar generalmente -aunque no exclusivamente- los jóvenes), pero también es un espacio en el que se suelen colarse la violencia, la discriminación, el acoso” consideró Toniolli en el marco de la presentación del proyecto, y señaló: “El Estado en muchas ocasiones está ausente, y en otras su presencia se reduce a los organismos de seguridad y control. Sin embargo, la nocturnidad es un espacio muy grande, complejo y multidimensional, y necesita de otras miradas e intervenciones”.

El legislador santafesino explicó que el proyecto aborda la nocturnidad desde tres dimensiones distintas: «La primera es la del cuidado, tanto de la vida como de la integridad de las personas. La segunda dimensión de la propuesta es la turística, la económica, la cultural: para nosotros la noche no es sólo un lugar a controlar, sino también a potenciar, porque genera puestos de trabajo y promueve nuestras expresiones artísticas y culturales. La tercera es la mirada comunitaria: el consejo consultivo de este organismo es para nosotros una apuesta por la participación de todos los actores que hacen a las actividades nocturnas: los trabajadores, los empresarios, los músicos, los artistas, la juventud y sus organizaciones, las autoridades locales, y también quienes han atravesado situación traumaticas y lograron convertir el dolor en militancia por una sociedad mejor», apuntó.

“El objetivo es intentar garantizar la seguridad de nuestros pibes. Necesitamos que puedan salir y puedan volver sanos y salvos, que no haya más discriminación, que no haya más Martines” sostuvo Oscar Castelucci, titular de un asociación civil que lleva el nombre de su hijo Martín, muerto por los golpes recibidos por un patovica en un boliche de Lanús, en 2006.

Además de Castelucci participaron del evento otros familiares de víctimas de hechos de violencia acaecidos en establecimientos nocturnos, como Edgardo Orellano, padre de Carlos «Bocacha» Orellano (asesinado en el boliche Sr. Ming de Rosario), y familiares de víctimas de Cromagnon.

Asimismo, intervinieron en la presentación los diputados Ricardo Herrera y Eduardo Valdés; funcionarios como Silvia La Ruffa, secretaria de Articulación Federal de la Seguridad del Ministerio de Seguridad de la Nación; Rodrigo Holmberg, del Instituto Nacional de Juventudes (INJUVE); Rafael Villanueva, director de Asistencia Inmediata de la SEDRONAR; Agustín Balladares de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación; y Lisandro Manzan, director del Registro Público de Controladores de Admisión y Permanencia de la Provincia de Buenos Aires; representantes de H.I.J.O.S Capital y de organizaciones juveniles como la JP Evita.

También fueron de la partida distintos gremios y cámaras empresarias del sector, como la Unión Personal de Seguridad de la República Argentina, las Cámaras de Empresarios de Discotecas y Entretenimientos de la Ciudad de Buenos Aires (CEDEBA) y de provincia de Buenos Aires (CEDIBBA), el Sindicato Único de Trabajadores de Control de Admisión y Permanencia de la República Argentina (SUTCAPRA), y el Sindicato Único de Trabajadores de Espectáculos Públicos (SUTEP).