fbpx

Tras desandar ocho años al frente del Partido Justicialista (PJ) rosarino, Eduardo Toniolli asumirá a fines de diciembre próximo como secretario general del partido a nivel provincial. Y, a las puertas de un 2021 con impronta electoral, uno de los desafíos será reforzar la premisa de “unidad en la diversidad”, que garantizó el retorno a la Casa Gris y que, al mismo tiempo, casi aloja al peronismo en el Palacio de los Leones, en 2019. También procuró bajar los decibeles a una eventual suspensión de las primarias (Paso), tema que comenzó a marcar el pulso de la agenda política argentina.

Luego de que el gobernador Omar Perotti se mostrara el viernes pasado de acuerdo con suspender las elecciones primarias de 2021 por la situación excepcional que vive el país frente a la pandemia de Covid-19, Toniolli buscó templar los ánimos del resto del arco político santafesino.

“Es un tema que amerita una discusión interna, pero hay que posponerla por el momento. Falta mucho camino por recorrer y lo más importantes es que ese debate, llegado el caso, se dará en el Congreso nacional y en las Legislaturas provinciales”, aseveró el concejal.

Al respecto, Toniolli agregó: “Ni propios ni extraños deben preocuparse de antemano, porque incluso escucharemos a los expertos en materia sanitaria. Además, la discusión sobre las Paso contemplará a todos los espacios políticos. No hay que alarmarse”.

El PJ de Santa Fe viene de conformar una lista de unidad (en sintonía con el mandato de la conducción nacional de esa fuerza) para la renovación de su autoridades el 20 de diciembre próximo. Ricardo Olivera continuará al frente del espacio y la concejala rosarina Norma López ocupará la vicepresidencia, instancia que también consolida al partido político como el primero con paridad de género en la provincia.

Toniolli, futuro secretario general del peronismo santafesino, enfatizó que “la unidad en la diversidad sigue siendo la consigna para materializar las transformaciones que necesitan la Argentina y la provincia para salir adelante y, sobre todo, encarar la etapa de reconstrucción después de la pandemia”.

Si hay un lugar donde los sectores populares pueden depositar su esperanza, es nuestro proyecto político. El macrismo ya demostró lo que es capaz de hacer y cuáles son sus objetivos”, fundamentó.

Al repasar su gestión al frente del PJ de Rosario, que se inició en 2012, Toniolli reivindicó como pieza clave el proceso de tonificación militante encarado previamente por las administraciones nacionales de Néstor y Cristina Kirchner. Luego enumeró como factores determinantes “la enorme participación de las mujeres y la creación de diversas comisiones que permitieron capitalizar la riqueza del peronismo, que consiste en su inserción en los barrios, las Universidades, los gremios y distintos sectores culturales”.

Asimismo, recordó que el ballottage de 2015 (Mauricio Macri-Daniel Scioli) disparó “una gran movilización de sectores que, genuinamente identificados con el peronismo, pero no todos con militancia activa, encontró en la departamental un ámbito para organizarse frente a lo que podía venir con el macrismo”.

Esa instancia redundó, un año después, en una importante campaña de afiliaciones. “Sólo en el departamento Rosario hubo 10 mil anotados”, rememoró el dirigente. Y atribuyó esa instancia al “impacto negativo del gobierno de Macri con sus políticas antipopulares”.

También en 2016 tuvieron lugar las elecciones internas del justicialismo provincial, en las que imperó un acuerdo de unidad como el recientemente sellado. No obstante, en los departamentos Rosario y Santa Fe se votó. “La mayoría de los afiliados ratificó lo que veníamos haciendo en la ciudad. Esto también fue un hecho inédito”, subrayó Toniolli.

El dirigente destacó que, a partir de ese momento y antes que el PJ a nivel nacional, “distintos sectores, con miradas disímiles y trayectorias diferentes, entendieron que había que buscar puntos en común para limitar al gobierno de Macri y afrontar los desafíos por venir”.