En el marco de la presentación de la nueva línea de productos del Mercado Popular de La Toma, el concejal Eduardo Toniolli presentó un proyecto de Ordenanza que busca que pequeños productores locales de alimentos puedan proveer a almacenes y comercios de barrio.
“El comercio minorista de nuestra ciudad se encuentra concentrado, en la medida que un reducido grupo de empresas distribuidoras y cadenas de supermercados se han ido convirtiendo en proveedores exclusivos de los comercios de cercanía, decidiendo qué marcas se venden y a cuánto”, señaló Toniolli, y apuntó: “esto perjudica a los productores locales, a los comerciantes, y a los consumidores”.
En ese sentido, el edil justicialista explicó que “en Rosario hay un número importante de microempresas, de pequeños productores frutihorticolas, y de emprendedores sociales que producen alimentos saludables y accesibles, que -pese a que reciben muchas veces colaboración estatal- tienen una enorme dificultad en lo que refiere a la comercialización”, y ejemplificó: “las ferias dependientes de Economía Social solo contienen un parte muy pequeña de la demanda de los productores, que requieren más espacios para exposición y venta, y de los consumidores por acceder a dispositivos que suelen estar acotados al casco histórico”.
Toniolli -que estuvo acompañado por la diputada nacional Lucila De Ponti, el ex Presidente de la Federación Agraria Argentina, Omar Príncipe, los dirigentes gremiales Silvana Teisa y Sergio Rivolta, y el responsable del Mercado Popular, Celcio Moliné– planteó que la intervención del Estado local construyendo una red de proveedores para el comercio minorista “jerarquizará el trabajo de los productores, a través del acceso a la capacitación y a la existencia de nuevas acciones tendientes a garantizar la seguridad alimentaria, al tiempo que facilitará a los rosarinos el acceso a la producción local, diversificando la oferta, y beneficiando también a los pequeños comerciantes, que se verán fortalecidos al poder optar entre distintos proveedores en vez de tener que comprarle solamente a uno”.
“Queremos atender a las necesidades comunitarias en un contexto de espiral inflacionaria, y por eso creemos que el Estado municipal debe intervenir en las redes de producción, distribución y consumo de bienes indispensables, generando trabajo, fortaleciendo emprendimientos productivos familiares y cooperativos, y haciendo más accesible el acceso a bienes de consumo básicos”, concluyó Toniolli.